
Gloria Sosa Sánchez-Cortés
Respuestas Creadas en el Foro
Buenas! Mi lugar de enunciación en este curso es el de una mujer blanca, cis, con formación universitaria, europea (con pasaporte). Un lugar de privilegio.
Mi pregunta después de leerme el texto es ¿el lugar de enunciación puede cambiar según las estructuras de poder de los diferentes contextos?
Por ejemplo, hace muchos años estuve trabajando de limpiadora en Londres, donde las españolas no éramos muy bien recibidas ni consideradas. Es decir, ser española en ese contexto es muy diferente a ser española cuando he estado en otros países, por ejemplo en Nicaragua.
O por ejemplo, ser de Extremadura en el País Vasco (donde ha habido mucha migración extremeña) o, por otro lado, ser del País Vasco en el contexto de España para quienes luchan por la independencia.
¿O al estar hablando de un sistema globalizado colonialista, capitalista, heteropatriarcal y racista, esos son los ejes de opresión que deberíamos resaltar?
He respondido a la tarea con más preguntas que respuestas. Pero es que no me ha quedado claro del todo.
Veo el peligro de la tendencia a no querernos ver en el lado privilegiado, pero por otro lado, la realidad es más compleja…
Muchas gracias de antemano! Un abrazo
Muchas gracias por la aclaración! Un abrazo
Buenas, disculpad porque no había visto que este foro también era de presentación. Yo ahora había entrado por una duda. En el video del módulo 3, la última intervención habla de la Apa o algo así. ¿Me podéis explicar qué es? Por cómo lo nombre debe ser algo común aquí, pero es que no se qué es…
Aunque entiendo el sentido de lo que dice, ya me ha dado curiosidad. Un abrazo y muchísimas gracias por esta maravilla de curso y de recomendaciones de lecturas y vídeos.
La economía convencional, se basa en el mercado, y todo lo que no pasa por ahí no se visibiliza, ni el rol del trabajo del cuidado, ni la naturaleza y su explotación, como se apunta también desde el ecofeminismo. Pero que no se visibilice no quiere decir que no sea intrínsecamente necesario para el capitalismo este trabajo de los cuidados y esta explotación ambiental. Un extractivismo que se puede ver en el tiempo de las mujeres (sobre todo de las mujeres migradas, racializadas y empobrecidas) y de la propia naturaleza.
En ese sentido, tanto desde la Economía Política Feminista, como desde los ecofeminismos se apunta al conflicto capital-vida.
El capitalismo necesita crecimiento económico, pero no de una economía que se mida por el bienestar, el cuidado de la vida o la satisfacción de las necesidades individuales y colectivas, sino un crecimiento en términos de Producto Interior Bruto, de mercantilización, financiarización…
Necesitamos cambiar nuestra mirada para ver y valorar todas las labores de cuidado, no dejarnos engañar por reclamos publicitarios de autocuidado consumista, para no caer en formas de cuidarnos que llevan implícito la complicidad con otros ejes de opresión sobre otras mujeres… Me encanta la expresión que le he escuchado a algunas mujeres latinoamericanas, del “sospechómetro”… yo estoy últimamente muy sensible con este tema, con dejarnos engañar y “cuidarnos” entrando en el mercado y/o siendo cómplices de que otras mujeres no puedan cuidarse.
Muchas gracias Luz Piedad, me encanta lo del dolor unido a la fascinación!
Ya he empezado el módulo 2 viendo los videos y poco a poco a leerme los textos.
Estoy totalmente de acuerdo con la economía feminista, pero también se me queda corta en algunos momentos cuando no se le incorpora el aspecto de clase y raza que se aborda en el primer módulo y cambia muchísimo la mirada.
Muchas parejas heterosexuales cercanas con recursos terminan ‘resolviendo’ gran parte de esos cuidados con otras personas de clases más bajas. En la gran mayoría, mujeres migradas con menos derechos por un racismo institucional normalizado. Hace años, por ejemplo, mucha de esa migración eran de extremeñas de pueblos a Madrid. Casi siempre en condiciones laborales en las que esa misma pareja no trabajaría.
Esa complicidad de la que habla el vídeo se da algunas veces de cara a las mujeres de la misma clase social, pero no con otras.
Yo pienso que hasta que muchos hombres no se vean en la necesidad de responsabilizarse del cuidado, no se va a producir el cambio y si no abordamos los derechos de las personas migradas, la meritocracia y otras formas de clasismo eso va a ser muy complicado…
Por otro lado, ¿hasta qué punto no deberíamos desalarizarnos más todas las personas? dejar de tener tantísimos aspectos básicos de nuestra vida mercantilizados, para mí ese es un camino que explorar más (Pastora Filigrana en su libro El pueblo gitano contra el sistema mundo da unas ideas que me fascinaron;)
Y ya lo último, se nota que me gustan más las conversaciones de cafetería 😉, quería compartir el trabajo que están haciendo las compas de Trabajadoras No Domesticadas. Para mi un gran ejemplo
Las trabajadoras del hogar no queremos medidas asistencialistas
Un abrazo fuerte!
Me parece muy interesante el aspecto de la crítica que realizan, de pretender contemplarlo todo. Después de leer las lecturas obligatorias, lo entiendo como pretender que su forma de vivir ser mujer, de vivir la feminidad obligada, los estereotipos y la opresión de género la generalizan, es decir pretenden contemplar desde sus privilegios en cuanto a clase y raza, la “esencialidad universal.”
En ese sentido entiendo la crítica al gesto colonizador del saber, el pensar que tu realidad situada y tu análisis, percepción y vivencia de esa realidad, es la una realidad normativa o universalizable sin cuestionarte y valorar otras vivencias, análisis y saberes que contemplan ejes de opresión en los cuales las feministas de las teorías dominantes son privilegiadas.
Resalto de las lecturas esta frase del texto de Mara Viveros Vigoya.
“Su propuesta política se funda en la construcción de un movimiento social sensible a todos los tipos de opresión, exclusión y marginación: clasismo, sexismo, racismo, heterosexismo, sin priorizar ninguno de ellos de antemano, sino en forma contextual y situacional”
Me da un poco de apuro responder detrás de Luz Piedad que creo que ya lo ha dejado clarísimo, muchas gracias, y que además habla desde el protagonismo… pero me permito hacerlo al ser la propuesta en formato café.
Si no nombramos esas
luchas dentro de los feminismos, en realidad es que no están
incluidas en los feminismos hegemónicos. Para mí ese feminismo hegemónico no
incluye y muchas de las feministas no incluíamos algunos ejes de opresión que teníamos normalizados y ni siquiera veíamos. Yo lo agradezco y creo que tenemos que poner el cuidado en el corporativismo de algunas luchas.Las críticas, miradas diferentes, las crisis, los conflictos, creo que nos hacen crecer, mejorar, aunque algunas veces duela, porque nos hacen ver privilegios y reflejos de nosotras mismas que no nos gustaría tener (no están acordes con la imagen que tenemos de nosotras). Una unión que invisibilice esos conflictos no nos hace más fuertes, sino que nos inmoviliza, con posiciones diferenciadas, algunas (entre ellas me incluyo) en una posición de privilegio, más o menos cómplice con diferentes ejes de opresión.
Aprovecho para agradecerles el curso, esta semana sólo he podido ver el vídeo a cargo de la Dra. Ochy Curiel, que me ha encantado. Deseando leer todo lo aportado.
Sigo leyéndoles.
Un abrazo
Muchas gracias por las recomendaciones, me lo leí hace unos años y me gustó mucho. Aprovecho para agradecerles las lecturas y vídeos que nos estáis recomendando.
Debo reconocer que en algunos casos había intentado leer y escuchar otras voces decoloniales y admito que no me enteraba de casi nada (mi sensación eran muchos tecnicismos separados de la realidad) y me frustraba un montón.
Ahora lo estoy disfrutando y me está abriendo ventanitas.
Espero que estén bien ahora en Colombia con la situación difícil que se está viviendo según las noticias que me han llegado.
Un abrazo