• Mónica

    Miembro
    15 de octubre de 2022 a las 10:16 pm

    Puede ser que al comienzo, es decir en la primeras etapas de la educación pública, las aulas de enseñanza supongan un lugar idóneo para una educación igualitaria, porque se cuenta con las herramientas necesarias para hacerlo; el problema radica en que esto no es un hecho aislado, es decir, que otros factores alteran este proceso o lo flanquean, el propio papel mojado en el que quedan muchas veces los contenidos de esta materia, la propia familia, la sociedad en la que se vive o los medios de comunicación, etc.., el niño o la niña a medida que va creciendo se va empapando de todo lo que le rodea, y por mucho que la escuela sea la instancia socializadora menos desigualitaria, la igualdad es un objetivo que deberá reflejarse y plantearse por todo el conjunto de la comunidad educativa, la formal y no formal.

    La coeducación es responsabilidad del conjunto de la sociedad, y pienso que sí existen recursos para llevarla a cabo, el problema es que la responsabilidad de coeducar debe de ser compartida y si todos y todas fuésemos en la misma línea y rompiésemos con los estereotipos, educaríamos en igualdad.