• María

    Miembro
    9 de octubre de 2022 a las 6:10 pm

    Tras profundizar en el Plan de Igualdad de Genero en Educación, creo que es un ejemplo de lo que anteriormente hemos estado hablando de Educación Emancipadora, donde los propios usuarios son actores del propio cambio promoviendo el pensamiento critico, elaborando hipótesis y adoptando colectivamente decisiones.

    Quien mejor que el profesorado para saber de una forma real y directa de los problemas, situaciones y desigualdades que cada centro vive.

    Hemos puesto en el ojo del huracán a la clase política como responsables máximo de la educación que tenemos y cuando nos dan una cuota de responsabilidad como es hacer el propio plan por el cual se va a regir tu centro educativo parece que tampoco nos gusta.

    Para mi la fortaleza y la debilidad concurren en el mismo lugar en el propio Plan y del uso que de el hagamos.

    Por un lado es una fortaleza no solo por la normativa en si, sino por la forma de plantearla desde un nivel de auto diagnostico, auto proyecto y autoevaluacion, y todo lo que implica esta forma de gestionar los proyectos sociales. Al mismo tiempo que la comunidad educativa elabora el Plan se va concienciando de la problemática a la que desde el Plan tienen que dar respuesta.

    Y por otro lado puede llegar a ser una debilidad ya que esa cuota de responsabilidad que se le da a la comunidad educativa para crear su propio Plan si no se hace efectiva de forma adecuada puede ser un arma peligrosa.

    Por ultimo decir que la Guia que plantea el Plan la veo muy completa y acertada.